EN EL NUEVO SIGLO... NARIÑO VIVE
Jaime Rodriguez Torres
(Departamento de Nariño 6 de Agosto de 2001)
Fueron inmensos los ideales de los grandes hombres y mujeres que fundaron el Departamento en el amanecer del pasado siglo. Han transcurrido 97 años. Nuestro aporte a la paz y prosperidad de la Nación ha sido gigantesco. Sin embargo Nariño y muchas otras regiones colombianas sufren hoy terribles calamidades que no se compadecen con nuestro esfuerzo y sacrificio a favor de la patria.
Los sueños de los fundadores están inconclusos. El injusto centralismo ha golpeado sin misericordia nuestros anhelos. Para desventura también algunos hijos de nuestra región no han estado a la altura de estos sueños.
Por eso hoy, en el nuevo comienzo, tomamos con mayor vigor y mística los propósitos de los fundadores, le agregamos los nuevos proyectos y esperanzas de las comunidades que habitan nuestras ciudades y campos, tomamos valor bebiendo de la herencia de los luchadores por la justicia que nos antecedieron; de Capucigra y Tamasagra, de Gonzalo Rodríguez, De los Comuneros sureños, de Agualongo , de Manuela Aucú, y otros, para anunciar a los cuatro vientos, que ¡ Nariño Vive ¡, que los hijos del Sur hemos aprendido de los errores y nos proponemos arrancar un camino sin retorno a las tierras de amor y libertad, de justicia y dignidad, para todas nuestras gentes.
No estamos solos en este empeño, también desde el Cauca, Tolima, Caquetá, Putumayo y Huila, se abrazan a nosotros 6 millones de colombianos, hermanos del sur, con ideales gemelos. Desde otras naciones del mundo muchos seres humanos simpatizan con nuestra causa y la apoyan. Muy pronto recogeremos frutos jugosos. Por ahora en este aniversario de fundación nuestra invocación a todos los habitantes de Nariño, es a perseverar en el empeño, a cultivar y cuidar con esperanza y alegría los sueños de los fundadores y nuestros propios sueños porque... NARIÑO VIVE.
Departamento de Nariño 6 de Agosto de 2001
Correo enviado por ORLANDO FALS BORDA.
( 3 de Agosto del 2001)
Estimado Jaime: Como lo hablamos por teléfono esta mañana (hoy jueves) he pulido el primer borrador que te envié en la forma como te va ahora por este medio. Por supuesto, quedo pendiente de cualquier cambio o ajuste que haya que hacerle desde el punto de vista tuyo o del doctor Parmenio. Espero que les parezca adecuado en principio. Si lo creen conveniente, pueden publicarlo allá o en otras formas y compartirlo con los diversos compañeros del Sur. Recibe un cordial abrazo, con mis agradecimientos, y les deseo muchos éxitos en el evento del lunes. Amigo, Orlando Fals Borda.
SALUDO AL PUEBLO NARIÑENSE
De ORLANDO FALS BORDA (Bogotá)
6 de agosto de 2001
En esta fecha histórica en que se encuentra reunido el pueblo nariñense para celebrar el aniversario de la creación de su departamento, quiero enviarles mi más afectuoso saludo. Agradezco la honrosa invitación que el señor Gobernador del Departamento, doctor Parmenio Cuéllar, me ha hecho para asistir a esta feliz ocasión, que desafortunadamente he debido declinar por los delicados problemas que han afectado mi vida familiar. Por eso me ha sido imposible estar con ustedes, pero quiero, de todos modos, enviarles este mensaje de solidaridad.
Permítanme felicitarlos por el camino de renovación política que han emprendido en asocio con los otros cinco Departamentos del Suroccidente. Por primera vez en la historia nacional registramos la llegada al poder regional de gobernadores y alcaldes alternativos. Enhorabuena, pues la crisis social y económica por la que atraviesa la nación exige que los pueblos se sacudan de la vieja dominación del bipartidismo culpable de la situación. El ejercicio sucesivo del poder por los mismos grupos de intereses, ha hecho de la política y de la administración pública escenarios favorables al mantenimiento de oligarquías que no se han preocupado por la suerte de los pueblos sino de explotar para sí mismos los recursos del Estado. No han permitido que se den los cambios necesarios para salir de las crisis y emprender los caminos que conduzcan hacia la humanización de los modelos de desarrollo que nos han impuesto. La reforma política, la rural y la urbana, el ordenamiento territorial, el Estado regional, la descentralización y el establecimiento de economías solidarias, son cambios indispensables que desde hace años se vienen proponiendo, pero que siempre han sido obstaculizados por los políticos de la vieja guardia, a los que hay que volver a derrotar y desplazar.
Amigas y amigos nariñenses:
Frente a la situación de desasosiego y violencia que recorre a la nación y que ha afectado injusta y cruelmente a Nariño, siendo que este departamento se distinguió siempre por su pacifismo patriótico, quiero hoy hacer un llamado a su valiente pueblo para que, junto con los actuales gobernantes independientes, continúen siendo ejemplo para el resto del país en la búsqueda de la nueva República que nos satisfaga plenamente. Queremos seguir viendo a ustedes como activos motores en la construcción de las alternativas políticas que faciliten a todos los colombianos llegar a tan loables metas. Ustedes ya han marcado el paso para los demás colombianos, con la conformación de movimientos propios desde los años 80 que han revivido en pos de una auténtica democracia. Esta es la meta de las autonomías territoriales que posibiliten la construcción de un próspero Estado Regional Unitario en una Segunda República que se sobreponga a la Primera, aquella fundada en 1819 pero malograda por los gobernantes posteriores, en especial los de nuestro siglo. Pero esto, con lo importante que es, no es suficiente. Invito al pueblo de Nariño a no bajar la guardia y a seguir organizándose, con el fin de dar continuidad a los movimientos de renovación social, política, económica y cultural que han surgido en el Suroccidente y que hoy están en el poder regional. Debemos evitar que la clase política tradicional, con sus mañas de siempre, recupere la fuerza que le fue arrebatada en buena lid en las pasadas elecciones. Hay que acudir a las próximas todavía con mayor decisión, apuntalando a la administración victoriosa que elegimos el año pasado, para que siga desarrollando los programas que nos interesan. Con estos fines en mente, todos nuestros líderes en el campo y la ciudad, en universidades y colegios, en iglesias y comunidades, entre los artesanos que son el orgullo de Nariño, y con los grupos afrocolombianos e indígenas, todos deben seguirse reuniendo para trazar políticas y programas locales encaminados a estimular la participación de las bases y la organización colectiva que se necesitan para cambiar el mapa político en las próximas elecciones para Senado, Cámara y Presidencia de la República.
Sólo de esta manera se podrá garantizar que la novedosa e importante evolución política que se está dando en Nariño, como ejemplo para el país y para fundar la Segunda República, no sufra un retroceso y se convierta en una nueva fuente de frustraciones.
Quedo, por tanto, a la espera de que el vibrante Sur continúe marcando el paso y trazando el Norte de Colombia. ¡Que viva el futuro!
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